El undécimo elogio.
Aunque mis exámenes tenían un par de días de anticipación, no pude dejar de leer este interesante libro. Hablando de compromiso, debo haber sido encontrado día y noche apegándome al Undécimo Mandamiento. Aparte de eso, ¡qué lectura! Por costumbre, leí exactamente la última línea de la historia, de la cual me arrepentí. Aunque me mantuvo anticipando un final feliz, definitivamente me habría sorprendido en estos momentos, se esperaba que lo estuviera si no hubiera leído la última línea. ¡Qué libro! Casi no tengo palabras para describir cuán involucrado estaba en la vida de Conner, cuánta tristeza y horror cargué en mi corazón durante la lectura de la oscura mentalidad humana y el respeto y aprecio por la bondad. Este fue mi primer libro de Jeffrey Archer y ahora creo que se ha ganado su amor por los fanáticos.