Bueno, ciertamente espero que no desde que publiqué mis trabajos anteriores.
Cuando hablo en eventos y clubes de lectura y surge este tema, es fácil quedar atrapado en el “estigma” asociado con la autoedición. Yo, por mi parte, lo sentí, y sigo sintiéndolo cuando mis dos primeros libros (a veces) son rechazados por no ser publicados tradicionalmente. Les puedo asegurar que si CADA autor recibiera un contrato de libros con una editorial, no tendrían que recurrir a la autoedición. Pero no todos los escritores tienen una opción. Y si tienes un libro, ¿por qué no deberías tomar CUALQUIER camino para imprimirlo?
La autoedición funcionó para mí (en ese momento) y funcionó muy bien. Me proporcionó la plataforma adecuada para practicar mis habilidades de marketing y publicidad, para crear una base leal de lectores, para crecer como escritor y, finalmente, para asegurar una base para mis futuros trabajos. En resumen, la autoedición sentó las bases para que yo llevara mi trabajo al siguiente nivel, y finalmente conseguí un contrato con Lake Union Publishing. Los caminos son personales, pero estoy muy agradecido por el que elegí … y por cada paso en el camino.
Mira mi blog sobre este mismo tema. Aquí está la esencia de esto: autopublicado o publicado tradicionalmente, hay buenos y malos en ambos. ¿No podemos llevarnos todos bien?
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