Creo que si los niños están expuestos a la lectura desde una edad temprana y ven a sus padres hacerlo, entonces sí, les interesará leer libros.
Yo era un ratón de biblioteca, que solía leer durante horas e incluso encontraba formas de intentar leer en la ducha. Cuando jugaba en la computadora, si tenía tiempo de carga, y si podía salirse con la suya, levantaba mi libro por un minuto. Leía en clase, en el retrete y debajo de las mantas por el tenue resplandor de un teléfono celular. Hoy en día tengo un niño pequeño, así que no puedo leer con tanta frecuencia.
A veces empiezo a recitar un libro suyo que he memorizado, y se emociona mucho, y sale corriendo para traerme ESE libro. Está en el momento de escribir 16 meses de edad. Le gusta que le lea y, a veces, se sienta con un libro en su regazo y trata de leerlo él mismo. (Por lo general, el libro dice “da da daaah daaahhh daaahhh da) Aquí está, leyendo su libro mientras recibe un cambio de pañal.
Entonces, si los padres del niño tienen una actitud positiva hacia la lectura, es mucho más probable que el niño disfrute de la lectura. Si hay una actitud despectiva, el niño probablemente también la heredará.