Escribir en un diario tiene muchos significados para diferentes personas, pero dos para mí son: revisar y revisar. Sí, sé que ambos son lo mismo, tengan paciencia conmigo.
En primer lugar, cuando se escribe algo, se te sale de la cabeza, lo que a veces puede ser un lugar desordenado. Una vez que sale, puedes revisarlo (y otros también lo hacen si lo compartes) desde un lugar más claro. Puedes terminar mirando algo que acabas de escribir y preguntarte cómo tiene sentido eso en tu mente.
En segundo lugar, en el momento en que escribe sus pensamientos, se hace en contexto a ese momento de su vida. Puede regresar y leer esta entrada meses o años más tarde y desde esa nueva perspectiva puede comprender el camino que está detrás de usted. Para poner esto en perspectiva ahora, piense en 5 o incluso hace 10 años. En ese momento de tu vida, ¿alguna vez imaginaste que serías quien eres ahora y dónde estás? Ahora trate de imaginar quién y dónde estará dentro de 5, 10 o 20 años a partir de ahora. Imposible. Al escribir las emociones y los eventos del día o la semana, suelta un marcador allí y sigue avanzando.
La naturaleza personal más allá de un diario significa que podemos darnos consejos en el futuro. Cuando el barco ha golpeado las rocas y miramos hacia atrás de donde venimos, podemos encontrar fuerzas para superar el obstáculo que ahora enfrentamos. De esta manera, es importante ser coherente en los buenos y malos momentos si elegimos comenzar este esfuerzo, no es necesario que sea regular, solo en momentos de felicidad y tristeza.