¿Qué te haría leer un libro o ir a una actuación literaria en vivo en lugar de ir al cine o ver todo en tu computadora?

Leer un libro es algo personal. Si dos personas leen el mismo pasaje, pueden imaginar la escena de manera diferente, pueden “ver” los personajes en su mente de manera diferente. Cuando veo una película, alguien más ha hecho la mayor parte de la imaginación por mí.

Por cierto, estoy citando libremente a mi hijo aquí, cuando tenía unos nueve años. Dijo que cuando lee tiene un cine en mente. Cuando ve una película, alguien más se ha imaginado.

Una lectura en vivo es algo muy interesante, suponiendo que la lectura sea del autor, porque usted tiene una idea de su perspectiva.

Por cierto, no pretendo que las películas sean malas o peores que leer. Son solo procesos diferentes. Depende de lo que busca. Como ir a un restaurante: a veces quieres una experiencia a la luz de las velas con el soufflée de alitas de pescado y otras veces quieres una hamburguesa grande y una gran pila de papas fritas.

El hecho de que un libro tiene mucha más sustancia que una película. Te daré un ejemplo: en mi libro de ficción histórica, “Tulagi Hotel”, nunca te digo de qué color es el cabello de la protagonista. Me han dicho que sea morena, rubia e incluso pelirroja. Esto es porque ves la escena en tu cabeza cuando la lees; cuando vas al cine, ves a la actriz, y eso es todo.

Siempre hay más sustancia en un libro que en una película.